La fecha del 3 de Agosto estaba marcada a fuego en el calendario de todo buen rockero de la isla
de Mallorca ante la inminente llegada de la mítica banda madrileña Obus, dentro
de un cartel que completaba otros legendarios del underground del metal extremo
nacional, los catalanes Ktulu, y los locales The Billy Young Band y No los
Sabemos.
A las ocho de la tarde
como estaba previsto se comenzaron a congregar los primeros asistentes en las
inmediaciones del Polideportivo Municipal de Ses Comes (Llubi) quienes
comenzaban a entrar en grupos reducidos pero sin cesar.
Pasaban cinco minutos
del horario fijado para que los jovencísimos No lo Sabemos irrumpieran en el
escenario para desgranar su repertorio formado por un buen puñado de canciones
de rock’n’roll “simpaticote” como les gusta definirse.
Desde un primer
momento la banda demostró tener ganas de demostrar su potencial y su actitud
fue encomiable y demostraron con humildad que el futuro les aguarda un hueco a
las puertas de bandas clásicas como Platero y Tú, La Fuga o Rosendo, para quien
ya abrieron en la isla el pasado año.
En su comienzo
interpretaron temas de su primer y segundo álbum -“Hazlo tu” (’08) y “Cuerda
para rato” (’13)- alternativamente cayendo canciones como “Luna” con ese toque
a los Platero; el rock sugerente y callejero de “Maldita ciudad”; la pegadiza
“Medioloko” y el medio tiempo potente “Pórtate Bien”.
La banda consiguió
conectar desde un primer momento con el público presente, que para entonces era
notable. Cesar demostraba sus cualidades como frontman y se dejaba acompañar
por las guitarras de Faust y Javier a su vez secundadas por una buena
interpretación de la sección rítmica de Luis al bajo y Joan a la batería.
La segunda parte de su
repertorio, pese a caer el tema “La autopista” de su primer álbum, fue
protagonista el trabajo que la banda se encuentra presentando en estos
momentos. “Invencible”, “La cordura”, el gran himno “Crisisteria” y “Rock’n
Roll” pusieron el punto final a una buena actuación a cargo del joven quinteto mallorquín.
Tras los preparativos
y a la hora prevista salieron los barceloneses Ktulu a reventar el escenario y
“Sadismo” y “Kontra Adicción” de su reciente trabajo “Makinal”
(’12). Pese a los iniciales problemas con las guitarras, la banda no se vino
abajo y prosiguió su actuación hasta que se pudo solucionar. Para entonces ya
estaba cayendo la fuerza sobre un público que tenía ganas de ver a la banda,
como se demostró en los rostros de la gente congregada en las primeras filas de
las inmediaciones del escenario.
“Sutil Mutilación”,
“Diez Toneladas”, “Pura Vida” y “Crisis de Fe” marcaban un repertorio centrado
en sus discos “Confrontación” (’97) y “Kutulu” (’99).
Blai empujaba, de
forma precisa, desde atrás a sus compañeros, Frank iba buscando de punta a
punta del escenario a los dos hachas del grupo, David y Jess. Y Wylly como no
podría ser de otra forma se estaba dejando la garganta para amedrentar a los
espectadores.
Prosiguieron con
“Mysterons”, la cover de Portishead que la banda editó en su Ep “2078” (’00).
Tras la cual volvieron a centrarse en esos álbumes mencionados anteriormente
con temas como “Stereotipo”, “Hiperactividad”, “Justicia” y “Alma.Limbo.Polis”.
El público respondía
bien a la banda que cada vez se encontraba más cómoda encima del escenario y
comenzó un repaso a su trayectoria más actual con “1000 Reflejos de una
presencia” y “Vamos” de su último trabajo y “Demonios” de su anterior “Show Caníbal”
los cuales cayeron entre los presentes como si de clásicos se trataran.
La banda se dirigía
hacia el final de su actuación y después de encarar la recta final con
“Delirium Tremens”, Jess comenzó a tener problemas con su guitarra que hizo que
“BioContaminación” sonara parte sin él, pero a que el ambiente del público no
dejo de estar en auge. Una vez solucionado por el propio guitarrista la banda
terminó con “Apocalipsis 25D” que tanta fama le dio y que a día de hoy sigue
siendo un referente para la banda.
Gran concierto de la
formación catalana que supo anteponerse a algunos problemas para destacar en
una noche donde el público quedó encantado con ellos.
00:30h, con un ligero
retraso sobre la hora prevista, salía a escena Obus, con Carlos Mirat subido a
la batería y franqueado a un lado por Paco Laguna y Fernando Montesinos al
otro. Comenzaron los primero acordes de “Corre Mamón” para que Fortu apareciese
lentamente en el escenario para unirse a la canción.
Los primeros temas
también fueron un tanto caóticos hasta que la banda pudo solucionar varios
problema, que esta vez venían por parte del bajo.
Seguían sonando “Más
que un dios” y “La Raya” y ya todo parecía recuperado para atacar “Autopista”
donde el público seguía coreando como desde un principio todos sus temas.
Con “Necesito más” la
banda ya mostraba su complicidad tanto arriba como el feedback con los de abajo
que para ese momento ya congregaban unas 800 personas.
Con el bloque formado
por “El que más”, “Pesadilla nuclear” y “Juego Sucio” el ambiente estaba caldeado
y el público se vino arriba.
Momento en el que la
banda aprovechó para bajar las revoluciones con “Complaciente o cruel” donde
subieron dos chicas, a petición de Fortu, al escenario.
La fiesta estaba
servida y temas como “Te visitará la muerte”, “Que te jodan”, “Dinero, Dinero”
y “Vamos muy bien” contribuyeron a que fuera mayor todavía.
Los primeros acordes
de Paco hicieron que todo el mundo supiese lo que iba a continuación “Va a
estallar el Obus”. Tras la euforia la banda comenzó un ritmo para que Fortu
fuese presentando a sus compañeros de viajes con especial atención, como no
podría ser de otra forma, a Paco Laguna.
Acto seguido comenzó a
pedir a algunos miembros del público -en su mayoría féminas- y a integrantes de
la bandas que actuaban con ellos esa noche a que subieran al escenario. Una
veintena en total para comenzar a despedir la noche con “Esta ronda la paga
Obús” que ponía el broche de oro.
Difícil combatir
contra un clásico pero si hay una banda que está demostrando poder hacerlo es
; si ya en el pasado año demostraron su solvencia delante
de Barón Rojo, en esta ocasión tenían la tarea de que no decayese el ánimo
entre el público a altas horas de la noches, ya eran las 2 de la madrugada
cuando “Thundestruck” sonaba por los altavoces.
Muchos tributos hay de
ACDC recorriendo el mundo pero sin duda el combo mallorquín es de los más
efectivos sin duda alguna con temas como “Whole Whotta Rosie”, “Stiff Upper
Lip”, “Back in Black” o “Hard as a rock” conseguían que la gente se entregaran
a ellos correspondiéndoles a su vez clavando cada una de sus notas.
De ahí al final del
espectáculo continuaron con más clásicos de la banda australiana como “Shook me
all night long”, “Hell Bells”, “T.N.T.”, “Let There Be Rock” o ese clásico por
antonomasia “Highway to Hell” con los correspondientes cuernos llevados por
Andreu Parra (Angus Young) que servía para despedir la noche.
Una gran noche, valga
la redundancia, para todos los rockeros de la isla y una velada que fue más que
digna teniendo en cuenta que se luchó contra otras fiestas isleñas.
Texto: Raúl Sújar Pozo
Fotos Tuco Martín
(grantuco@hotmail.com)
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